Page images
PDF
EPUB
[graphic][merged small]
[blocks in formation]

NOTAS SOBRE SU ORÍGEN Y PROPAGACIÓN, Y SOBRE SU INTRODUCCIÓN Y CULTIVO EN COSTA RICA.

Por JOAQUÍN B. CALVO.

No hay entre los productos agrícolas que al presente constituyen los principales ramos del comercio universal, ninguno que haya presentado ejemplo de un desarrollo tan rápido y extenso como el café.

Se debe la propagación del uso de este fruto, principalmente á los turcos; y la extensión primitiva de su cultivo, á los holandeses que fueron de los primeros en ensayarlo.

El aromático grano parece no haber estado complacido del todo en su suelo natal, y al emigrar á extranjeras regiones ha realizado un estado de inmensa grandeza y prosperidad.

En efecto, la vasta extensión de su cultivo ocupa tantos millones de brazos, y representa tantos millones de pesos, que la fabulosa proporción de la población general del mundo que vive de esta industria, y la del capital en ella invertido, la hacen figurar en primera escala entre los ramos de agricultura destinados á la alimentación.

Si se busca el origen de la planta y del uso del café, se encuentra que en la opinión más generalmente aceptada se considera comprobado en definitiva, que el café es produto indígena de Asia y Africa, en la parte que esas dos grandes divisiones de la tierra se acercan sobre el Mar Rojo; pero en cuanto al lugar donde primeramente se hiciera uso de él, se citan opiniones autorizadas que se contradicen las unas á las otras. Así pues, mientras que unos aseguran que el uso del café era conocido en Abisinia desde los primeros tiempos, otros dicen que fué introducido á ese país cerca de novecientos años antes de la Era Cristiana, atri

[graphic][merged small]
[blocks in formation]

NOTAS SOBRE SU ORÍGEN Y PROPAGACIÓN, Y SOBRE SU INTRODUCCIÓN Y CULTIVO EN COSTA RICA.

Por JOAQUÍN B. CALVO.

No hay entre los productos agrícolas que al presente constituyen los principales ramos del comercio universal, ninguno que haya presentado ejemplo de un desarrollo tan rápido y extenso como el café.

Se debe la propagación del uso de este fruto, principalmente á los turcos; y la extensión primitiva de su cultivo, á los holandeses que fueron de los primeros en ensayarlo.

El aromático grano parece no haber estado complacido del todo en su suelo natal, y al emigrar á extranjeras regiones ha realizado un estado de inmensa grandeza y prosperidad.

En efecto, la vasta extensión de su cultivo ocupa tantos millones de brazos, y representa tantos millones de pesos, que la fabulosa proporción de la población general del mundo que vive de esta industria, y la del capital en ella invertido, la hacen figurar en primera escala entre los ramos de agricultura destinados á la alimentación.

Si se busca el origen de la planta y del uso del café, se encuentra que en la opinión más generalmente aceptada se considera comprobado en definitiva, que el café es produto indígena de Asia y Africa, en la parte que esas dos grandes divisiones de la tierra se acercan sobre el Mar Rojo: pero en cuanto al lugar donde primeramente se hiciera uso de él, se citan opiniones autorizadas que se contradicen las unas á las otras. Así pues, mientras que unos aseguran que el uso del café era conocido en Abisinia desde los primeros tiempos, otros dicen que fué introducido á ese país cerca de novecientos años antes de la Era Cristiana, atri

buyendo á ciertas tribus semisalvajes de la parte alta de Etiopia, al Nordeste de Africa, donde el café es planta indígena, el haber sido los primeros que lo usaron.

Esto último parece admitido como el hecho más probable, si no en realidad cierto, aunque á la verdad, la historia antigua sobre el uso del café, se pierde, como la de tantos otros hechos, en la obscuridad de los tiempos.

En cuanto al nombre, se asegura que este fruto lo deriva de Kaffa, lugar al sur de Abisinia donde el café crece silvestre en gran profusión en la falda de los montes; y que ya á principios del siglo XV, tiempo en que empezó á ser cultivada la planta, la bebida preparada se designaba con el nombre de cobo ó cahove, coava ó care.

Ya entonces el uso del café no sólo era conocido en Abisinia, sino en Arabia. De este último país se extendió á Constantinopla y resto de Turquía, y por Siria pasó á Persia, y por el Cairo á todo Egipto, durante el siglo XVI.

Parece que en Europa la primera noticia que se tuvo del café, se debió á RAUWOLF, que lo conoció en Aleppo, Siria; y que la primera descripción botánica de la planta la hizo PROSPER ALPINUS, en 1582.

La introducción del producto en aquella parte de la tierra, la hicieron primeramente los venecianos en 1624, y veinte años después el uso de la bebida era general en la parte meridional de Italia. A Inglaterra, que es hoy el gran centro del comercio del grano, fué introducido en 1650, y en 1652 se abrieron cafés públicos en aquel Reino. DANIEL EDWARDS, comerciante de Smirna, fué el primero que lo importó á Londres, llevando también á un griego llamado PASQUA, á quien después estableció en una casa de café. En Francia un Embajador de MOHAMMED IV lo hizo conocer en la corte de LUIS XIV, y en 1669 y 1672 se abrieron cafés públicos en Marsella y París, respectivamente. En Viena, Austria, se abrió la primera casa de café en 1683, y en Berlín en 1711.

La extensión del cultivo del café principió en 1650, cuando los holandeses, á quienes se debe, como queda dicho, llevaron algunos pequeños arbolitos de Moca á las Indias Orientales, y los plantaron en Bourbon, según unos, ó en Batavia, según otros; y habiendo obtenido resultados satisfactorios, lo propagaron con éxito en la Isla de Java. Los holandeses lo llevaron tambien á Amsterdam, y de allí enviaron en 1714, á LUIS XIV, un cafeto que fué conservado en los invernaderos del Jardín Real.

De ese cafeto se dice que eran los primeros granos que vinieron á América, y que de ellos procedió el cultivo en las Indias Occidentales. Hay también referencias que indican que ya en 1715 el café era conocido en Santo Domingo y Haití; y de que un Capitán de nombre DECLIEUX, trajo á América en 1720 dos plantas, y que de estas se extendió á todas las colonias francesas. Igualmente aparece que en 1726

« PreviousContinue »