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SR. SILVA: Secretario, (Lee.)

AL SENADO: Los Senadores que suscriben proponen al Senado acuerde enmendar el artículo I de la Ley de diez y seis de Septiembre de mil novecientos dos, referente á los derechos que habrán de pagarse por la expedición de títulos de propiedad de marcas de ganado, suprimiendo las palabras «vacunas mayores» y substituyéndolas por «adultas de una ó varias clases de los ganados vacunos, caballar, mular y asnal» con cuya substitución, quedará el artículo citado de dicha Ley redactado del modo siguiente:

Artículo I.-Los derechos por la expedición de títulos de propiedad de marcas de ganado y sus productos serán de dos pesos, para los expedidos á favor de propietario que posea hasta cincuenta reses adultas de una ó varias clases de los ganados vacunos, caballar, mular y asnal, y de doce pesos y medio para los expedidos á favor de propietarios que posean más de cincuenta reses de las mismas condiciones.

interesante y de suma urgencia. El problema es este: La Ley dice «hasta cincuenta reses vacunas mayores.» Y la Secretaría de Agricultura al interpretar esa Ley ha exigido, en circular dictada al efecto, que el que tenga un solo animal no vacuno, una yegua, por ejemplo, ya no está comprendido en la Ley y ha de pagar los 12.50 que corresponde pagar al que tenga más de 50 reses de cualquier clase, cuando el acuerdo del Congreso fué que se pagara esa cantidad hasta cincuenta reses, de todas clases. Y á aclarar ese extremo es á lo que se limita la enmienda; en ella se dice «que posea hasta cincuenta reses adultas, de una ó varias clases, de los ganados vacuno, caballar, mular y asnal.» De esta manera se aclara la Ley.

Allá en mi provincia el agricultor, el labrador para poder ganarse un jornal necesita indispensablemente poseer por lo menos una bestia para ir y venir al lugar de su trabajo, á ese jornalero que tiene una sola yegua se le obliga ó á no tener el animal ó á pagar 12.50 pe

Palacio del Senado, Abril 6 de 1903.-Tomás A. Re-sos, cuando el acuerdo del Congreso fué que se pagacio.-Augusto Betancourt.- Adolfo Cabello.” SR. RECIO: Pido la palabra.

SR. PRESIDENTE: El Sr. Recio tiene la palabra. SR. RECIO: Para rogar al Senado que tratándose como se trata de una simple enmienda en la redacción de la Ley acordada por el Congreso y ya promulgada por el Presidente de la República, se proceda á la discusión inmediata de la enmienda que presentamos. Tratáse de facilitar el despacho de multitud de expedientes que están pendientes de resolución, por cuya razón propongo que se discuta inmediatamente.

SR. PRESIDENTE: ¿Algún Sr. Senador quiere usar de la palabra sobre lo que acaba de indicar el Sr. Recio? SR. PARRAGA: Pido la palabra.

SR. PRESIDENTH: La tiene el Sr. Párraga.

SR. PÁRRAGA: Aunque la enmienda tiene por objeto alterar una parte solamente de una ley ya sancionada. hay que darse, sin embargo, cuenta de lo que la Ley es y de lo que la enmienda significa; de la relación que existe entre la enmienda y las demás partes de la Ley y de lo que aquella pueda influir en el desenvolvimiento general de esta, para que podamos apreciar exactamente todo ello y despues votar á conciencia la modificación propuesta por el Sr. Recio. Y yo creo que esto no puede hacerse hoy, ni sin que la Comisión de Agricultura, Industria y Comercio estudie antes el asunto y nos dé su dictámen.

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sen 2 pesos hasta tener cincuenta reses de todas clases. Este fué el acuerdo del Congreso, y quedaban comprendidas dentro de él toda clase de ganado, el vacuno, el caballar, el asnal y el mular. De manera que la cuestión no necesita el estudio que desea y propone el Sr. Párraga, porque es sencillo y basta enunciarla para que quede comprendida. De ahí que entendiéndolo yo así, proponga se discuta inmediatamente para evitar la demora de más de mil hierros que están pendientes de despacharse en espera del acuerdo del Con

greso.

SR. PRESIDENTE: Se somete á votación la proposición del Sr. Recio, consistente en que se discuta inmediatamente la moción que acaba de presentar en unión de otros señores Senadores. Votación ordinaria. (Aprobada.) Se pone á discusión la moción. SR. RECIO: Pido la palabra.

SR. PRESIDNE: La tiene el Sr. Recio.

SR. RECIO: Después de lo que he expuesto, creo que no tengo necesidad de más ampliación, y como no se ha levantado ningún Senador á oponerse á la enmienda que discutimos, me concretaré á manifestar que si el DIARIO DE SESIONES estuviera al día, podrían verse allí que hasta en mis ejemplos cité el caso de que teniendo una, dos ó tres cabezas de ganado bastaría, es tando dentro de la concesión del Congreso; pero la Secretaría de Agricultura no solo lo ha entendido de distinto modo, limitando esa concesión al ganado vapesos, que se ponga toda la clase de ganado que posea el que los obtenga, cuando en la Ley primitiva se dice «que tengan menos de 50», aunque no puedan utilizarse para el ganado caballar; pero la Secretaría de Agricultura no concede el hierro á los que tengan ganado no vacuno, que más tarde por la Secretaría de Agricultura, en su circular á que antes me he referido, se ha excluído de la clase obligada á pagar dos pesos. Allí hablé de una á 50 vacas, de una á 50 reses de cualquier clase de ganado y sin embargo, la Secretaría restringió el precepto legal hasta el extremo de que bastaba poseerse una res no vacuna para no disfrutar los beneficio de esta Ley dictada precisamente para proteger á los pequeños propietarios de ganado.

La urgencia recomendada por nuestro compañero el Senador por Camagüey, y que á mi juicio, y en térmi-cuno, sino que ha exigido en los certificados de dos nos generales debe ser apreciada por el Senado con suma parsimonia proporcionada á la importancia de su mición legislativa, debemos tomarla en cuenta solamente para recomendarla á la Comisión que haya de dictaminar, pues no ha de ser tanta que no pueda seguir aplicándose por una semana más que tardaría el Senado en resolver definitivamente el asunto, una Ley que lleva algunos meses de promulgada.

SR. RECIO: Pido la palabra.

SR. PRESIDENTE: Tiene la palabra el Sr. Recio. SR. RECIO: Si yo he propuesto que se discutiera inmediatamente la moción presentada por nosotros, es porque la creía tan sencilla de comprender en su alcance que bastaba exponerlo para que el Senado lo comprendiera, y aceptara ó rechazara. Además existe el precedente de haberse discutido enmiendas análogas á estas, tendentes á aclarar la redacción de algún artículo de una Ley inmediatamente después de presentada. Yo no tendría inconveniente en que se dejase esta moción nuestra, algún tiempo, para poderla estudiar el Senado minuciosamente; pero no me es posible ceder en este punto porque urge no se aplace este problema que es

No fué nuestro propósito dictar una Ley casuística en que dijéramos que hasta 50 reses vacunas se abonasen por derecho de inscripción del hierro con que se las marcase, solo dos pesos; pero que si el propietario de ese ganado vacuno aunque fuese de solo tres ó cuatro ó una vaca y á más tuviese una yegua pagase ya los 12.50 pesos que la misma Ley señala para propietarios de más de 50 reses vacunas; es decir, que una

pequeña yegua que valga $20 ó menos, es bastante para que el propietario se le conceptue en el caso del que posea 51 ó más reses vacunas, que por muy poco que valgan, valen siempre más de $1.500. No hay explicación posible para tamaña interpretación, el más elemental sentido común era suficiente para leer en la Ley que discutimos, que al decir «50 reses vacunas» se quiso decir «50 reses de cualquier clase de ganado.» Esta, en síntesis, es la aclaración que constituye la enmienda objeto de este debate.

SR. PÁRRAG、: Pido la palabra.

SR PRESIDENT: Tiene la palabra el Sr. Párraga. SR. PÁRRAGA: He esperado á que se anunciase la votación para pedir la palabra, con el fin de llamar la atención sobre la manera como estamos legislando. Se ha presentado un proyecto de modificación de una Ley. para el cual se ha pedido la urgencia, que significa tanto como prescindir del prévio estudio reglamentario de Comisión; me he opuesto á ello, indicando la conveniencia de que tal estudio se realice y sin embargo, se va á votar la modificación propu sta, no ya sin discusión, sino sin que se haya leído siquiera la Ley que se trata de enmendar y luego, en frente de su texto, la modificación se recomiende, sin lo cual no podrá el Senado apreciar la materia sobre que va á votar. SR. RECIO: Pido la palabra.

SR. PRESIDENTE: Tiene la palabra el Sr. Recio. SR. RECIO: Ya antes dije que esperaba que se argumentara ó que se pidieran las razones de mi moción para darlas y por deferencia á los señores Senadores puesto que nadie solicitó explicación alguna, he dicho todo lo que el Senado ha oído. También me había propuesto leer la Ley primitiva tal como ella se publicó en la «Gaceta» que aquí tengo abierta por el lugar donde está la Ley, que dice así:

que no ha sido tratado quizas por causa mía, no intencional.

La Compañía Hispano Americana del Gas, dirijió hace ya algunos meses una comunicación á los señores Senadores de la Provincia de la Habana, y habiendo tomado yo la comunicación para estudiarla, de acuerdo con algunos de mis compañeros, y formar juicio respecto á la petición que hace la Compañía de Gas, relativa á modificar cierta orden militar, como el asunto no fué apremiado por nadie, permaneció en mi poder hasta ahora; pero he recibido una visita del administrador de esa Compañía, para inquirir el estado del asunto, y como quiera que, tal vez por culpa mía, no se discutió en la Legislatura anterior, le ofrecí pedir en esta que se tome en consideración y pase á la Comisión correspendiente. De manera que traigo al Senado la petición de la referida Compañía, y la entregaré á la Secretaría, y como está presentada en Legislatura anterior pido al Senado que la tome en consideración y resuelva en la presente Legislatura acerca de

ella.

SR. PRESIDENTE: Es de Reglamento y así se hará.
SR. SILVA: Secretario. (Lee)
AL SENADO:

La Comisión de Hacienda y Presupuestos, en vista de las indicaciones en el Mensaje enviado por el Presidente de la República al Congreso, el día 6 del corriente mes, encaminadas á demostrar que los presupuestos presentados en Noviembre último, que se encuentran en la actualidad pendientes del exámen de la Comisión, no podrían ser aplicados hoy, sin promover una perturbación en los servicios, por lo que debe procurarse de algún modo remediar los graves inconvenientes que la aprobación de los mismo ocacionarían, y teniendo en cuenta la conveniencia de votarlos, si«Art. 1. Los derechos por la expedición de títulos quiera puedan regir en el segundo semestre del año de propiedades de marcas de ganados y sus productos actual, adaptándolos á las necesidades actuales de la serán de dos pesos para los expedidos á favor del pro-administración pública, tiene el honor de someter al pietario que posea hasta 50 reses vacunas, mayores y Senado, el siguiente de 12,50 pesos para los expedidos á favor de propietarios que posean más de 50 reses de las mismas condiciones. >>

A esto es la enmienda y enmendado el artículo quedará como ya habeis visto. A esto es la variación que se hace. Antes decía «vacuno mayor» solo, y ahora dirá uno ó varias clases de ganado asnal caballar, mular y vacuno que es lo que dice la enmienda. De manera que estará satisfecho con esto el Sr. Pá

rraga.

Proyecto de Resolución:

Se resuelve: rogar al Ejecutivo se sirva remitir al Senado en el término más breve prosible y como ampliación á los presupuestos Generales de la Nación pendientes de exámen, relación de las modificaciones que á su juicio deban hacerse en los mismos para adaptarlos á las necesidades actuales de los servicios públicos.

Palacio del Senado, Abril 13 de 1,903.
Firmado.-Carlos I. Párraga.-M. Morúa Delgado.

SR. PRESIDENTE: ¿Algún señor Senador quiere usar de la palabra? (Ningún señor Senador solicita hacer-Antonio González Beltrán.-J. Fernández Roldán. uso de la palabra.) Se somete á votación la proposición del Sr. Recio. (Es aprobada.)

SR. ZAYAS: Pido la palabra.

SR. PRESIDENTE: La tiene el Sr. Zayas.

SR. ZAYAS: Conforme à un acuerdo que tomó el Senado, cuando un asunto hubiese sido propuesto en alguna legislatura y quedase pendiente sin haberse llegado á resolver, será necesario para que en la legislatura siguiente se trate, que alguno de los señores Senadores así lo solicite; y como á mí me interesa que se trate de la Ley de extranjería que he presentado y quedó pendiente de informe de la Comisión de Códigos, y otro tanto me acontece respecto á una Ley modificando el Recurso de amparo de la posesión que pasó también á la Comisión de Códigos y está pendiente de su informe, yo, ajustándome á ese acuerdo, pido al Senado tenga por reproducidos dichos proyectos de Ley, á fin de que en esta legislatura se traten, si es posible. Al própio tiempo quiero tambien recordar otro asunto

-Nicasio Estrada y Mora.-Manuel R. Silva.

SR. ZAYAS: Pido la palabra para una cuestión de orden.

SR. PRESIDENTE: La tiene el Sr. Zayas.

SR. ZAYAS: Tengo presentada una moción desde la anterior sesión, relativa á este mismo particular, y desearía que se le diera lectura porqué se relaciona intimamente con este punto.

SR. SILVA: ¿Se dió cuenta oficialmente de ella?

SR. ZAYAS: No se dió cuenta de ella oficialmente porque la lectura del Mensage del Ejecutivo llevó todo el tiempo, y el Sr. Presidente me preguntó si tenía inconveniente en dejarla para otra sesión, y contesté que no tenía ninguno. Debe haber dos mociones mías, desde la sesión pasada.

SR. SILVA, Secretario: Aquí hay una de los señores Zayas, Frías, Cabello y Lazo.

SR. ZAYAS: Pido la palabra para hacer una explicación.

SR. PRESIDENTE: La tiene el Sr. Zayas.

SR, ZAYAS: Esta moción fué presentada el lunes pasado al abrirse la presente Legislatura; y no pudo ser leida porque el Mensaje del Presidente ocupó el tiempo que estuvimos en sesión.

Desde luego que ahora se observará que es muy corto el plazo que en ella se fija para que se comience á discutir el Presupuesto, toda vez que se habla de la primera sesión después del día 15 del mes que cursa; pero el objeto de esta moción, su importancia, no puede ocultarce al Senado: el Presupuesto debiera estar hecho hace mucho tiempo, sin embargo aún el Senado no ha comenzado á discutirlo. Además, en el Mensaje se indica que ese Presupuesto ya no podría aplicarse, porque habría de producir un trastorno extraordinario en la administración, sin remitirnos, sin embargo de eso, indicación alguna, ni datos de ninguna especie, para que al discutir el proyecto, teniendo en cuenta esos datos, pudiera resolver el Congreso res- | pecto á ellos lo que estimare oportuno.

Del tono de ese Mensaje parece desprenderse que ha de transcurrir largo tiempo sin que esté el Pre-upuesto concluído, y acaso lleguemos á agotar esta Legislatura sin que el Presupuesto pueda discutirse en ambas Cámaras, llegando, por consiguiente, el primero de Junio, y volviendo á quedar indotados de presupuestos hasta último de año. Acaso con esto podrían quedar satisfechos algunos que opiñan que el presupuesto debe regir de Enero á Enero; pero á los que opinamos que debe regir de Julio á Julio, y que no hemos encontrado ningún motivo para cambiar esta forma usual de regir los presupuestos, nos parece conveniente que el presupuesto sea aprobado antes del primero de Junio, y no creo que puedan ser óbice á la aprobación del presupuesto, las reformas, verdaderamente radicales algunas, que el Ejecutivo ha introducido en los servicios despues de haber mandado aquí el proyecto. En cambio, se verá facilmente que hay un gravísimo mal en que el Ejecutivo proceda sin presupuestos, en que la Nación siga viviendo su vida económica sin presupuestos, porque sin presupuestos todos los servicios están sujetos á cambios contínuos, y como ya tenemos el ejemplo de que se han realizados reformas trascedentales sin tener para nada en cuenta ese proyecto de presupuestos, sino la voluntad libérrima del Ejecutivo, creo que el Congreso está en el deber de apresurar todo lo que pueda, la discusión y aprobación de los presupuestos. Si existen reformas, si hay algunas que deban introducirse en los Presupuestos, la discusión de estos dará lugar para hacerla, presentando las mociones convenientes, cosa que no es tan difícil de hacer porque todos conocemos esas reformas y si no las conocemos al detalle en el momento actual, podemos obtener del mismo Ejecutivo cuantos datos sean necesarios: pero no creo en manera alguna que el Poder Legislativo, deba dirigirse al Ejecutivo pidiéndole en materia de presupuestos que le remita las reformas que estíme oportunas del proyecto predicho cuando es facultad propia y expontánea del Ejecutivo el remitir esos presupuestos en época determinada por la Constitución.

saber qué es lo que debe reformarse y qué es lo que debe tomarse en cuenta, sino utilizando los señores Senadores el derecho que tienen de presentar por medio de enmiendas ó mociones las reformas que crean justas y que pueden ajustarse á lo que ya ha dicho el Ejecutivo. Y no debemos retardar la discusión para que el país no se pregunte, como se está preguntando á diario, ¿por qué no discutimos el Presupuesto? ¿por qué lo dejamos dormir en la Comisión de Hacienda? y para que no resulte que el Poder Ejecutivo al proceder con libertad absoluta aparezca en buen lugar ante el país, porque si de él se piensa que procede libérrimamente es por que el Poder Legislativo no le da pauta ni norma para que por ella proceda. Yo entiendo que importa mucho al Congreso cumplir su cometido constitucional y discutir ese Proyecto inmediatamente, de manera que discutido por el Senado haya tiempo suficiente para que en la Cámara de Representantes que, á mi juicio, debió ser la primera en conocer el asunto, aunque el Ejecutivo pudo escojer el Cuerpo á quien remitirlo, se discuta con toda amplitud antes de que llegue el día en que deba, conforme á los precedentes que ley ninguna ha derogado, comenzar á regir dicho presupuesto. De modo que el objeto de mi moción, es que en una sesión próxima. la primera que se celebre después del día 15, ya que algunas materias de urgencia, ocuparan las sesiones intermedias, se dé comienzo á discutir los presupuestos en la forma que el Senado estime oportuna; pero de modo que se vea que hacemos algo y que emprendemos el camino que ha de conducirnos á la aprobación de los Presupuestos.

SR. PRESIDENTE: ¿Algún señor Senador desea hacer uso de la palabra?

SR, PÁRRAGA: Como presidente de la Comisión de Hacienda, deseo saber que es lo que se vá á discutir. Se ha leido una comunicación de la Comisión de Hacienda, y el Sr. Zayas ha pedido, como cuestión de orden, que se dé lectura á una moción que él tenía presentada anteriormente; se necesita determinar que es lo que se discute, por que el Sr. Zayas, al explicar los móviles á que esa moción obedecía, ha hecho observaciones de las que resultaba ella en frente del dictámen de la Comisión de Hacienda; y yo, para saber en que oportunidad debe contestarle la Comisión, desearía que se determinara, préviamente, que es lo que se vá á discutir. Adelantaré, sin embargo, que, á mi juicio, no se puede discutir una moción antes que el dictámen de una Comisión; siempre tiene preferencia el dictámen de una Comisión sobre las mociones que, sobre el mismo punto, presente algún señor Senador.

SR. ZAYAS: Para hacer una pregunta. ¿Se trata de un dictámen de Comisión pedido por el Senado, ó es un dictámen expontáneo de la Comisión de Hacienda? SR. PÁRRAGA: Expontáneo de la Comisión, y el efecto es el mismo.

SR. ZAYAS: Entonces no es un dictámen, Sr. Presidente, es una petición que hace la Comisión de Hacienda.

SR. PARRAGA: Pero aún así, siempre tendría preDe modo, pues, que yo entiendo que nosotros no de- lación á la moción presentada por los señores Senabemos preocuparnos de las reformas que el Ejecutivo dores. Las Comisiones tienen un deber, un interés haya podido introducir, sino que es el Ejecutivo el que más alto y una intervención más elevada en los asundebe cuidarse de enviarnos nota detallada y circuns-tos sometidos al Senado, y por este á ellas que los tanciada de esas reformas á fin de que nosotros las tomemos en consideración y las acordemos ó no. El papel del Senado en este asunto debe limitarse á discutir los presupuestos tales como ellos han venido, introduciendo en los mismos las enmiendas que estime conveniente dentro de las limitaciones de la Constitución; pero no solicitando del Ejecutivo datos para

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mismos Senadores; las Comisiones pueden dictaminar ó hacer peticiones que tanto monta-al Senado; y la Comisión de Hacienda, en cumplimiento de un deber suyo, y refiriéndose á nn asunto á ella sometido por el Senado presenta hoy una petición ó dictámen, es decir manifiesta una opinión sobre lo que á su juicio debe hacerse en tal asunto; cuya petición,

dictámen ú opinión, debe ser considerada con preferencia á una moción de varios señores Senadores, sobre el mismo punto.

SR. ZAYAS: Pido la palabra.

SR. PRESIDENTE: Tiene la palabra el Sr. Zayas. SR. ZAYAS: Yo no me opongo á que se discuta previamente lo que ahora se llama «petición de una Comisión» y que antes se calificó de dictámen, á lo cual me oponía yo porque no estaba conforme con ese calificativo; no tengo, pues, inconveniente en que esa petición se discuta primero. Y llamé la atención de que se titulára dictámen por que la petición respondía á algo que ha venido con el Mensage presidencial; este Mensage se ha leido aquí en la sesión anterior y en ella no se acordó que pasara á la Comisión de Hacienda; por consiguiente no podía yo concebir que la Comisión de Hacienda dictaminara sobre una cosa que no había pasado á su conocimiento y estudio; pero si se tratara de una petición no tengo inconveniente en que se discuta primero, porque como ya se ha visto, mi proposición, en cierto modo, está en frente de la petición de la Comición de Hacienda, y claro es que el discutirse esta primero no afecta ni altera en nada mi proposición. De manera, que si la Presidencia quiere alterar el orden de la discusión, no hay inconveniente ninguno por mi parte.

SR. PRESIDENTE: La presidencia agradece la deferencia del Sr. Zayas.

SR. RECIO: Pido la palabra.

SR. PRESIDENTE: La tiene el Sr. Recio.

do si se deja ó no sobre la Mesa. Es una petición, y el Sr. Zayas está conforme en que se discuta con anterioridad á la suya.

SR. RECIO: Siendo una proposición puede proceder el que se imprima y reparta á los Sres. Senadores para discutirla en una sesión inmediata. Entendía yo que el acuerdo prévio era discutir una ú otra, y de ahí mi proposición de que se dejara para la sesión inmediata. SR. PRESIDENTE: En la sesión inmediata según previene el Reglamento; pero como la misma Comisión que lo suscribe ha dicho que eso no es un dictamen si no una moción, como tal moción no había que dejarla sobre la mesa á menos de que ahora lo solicite el Sr. Recio del Senado y este lo acuerde.

SR. RECIO: Yo no quiero enmendar la interpretación del Sr. Presidente, que, desde luego, estoy dispuesto á atender.

SR. PRESIDENT: No se trata de un dictamen sinó de una moción y por lo tanto podría ahora el Sr. Recio solicitar del Senado que quedara sobre la mesa. SR. RECIO: Sea una moción ó una petición puede proceder el que se imprima y se reparta á los Sres. Senadores para discutirla en una próxima sesión, porque entendía yo que el acuerdo previo iba á ser discutida una y otra inmediatamente; de ahí mi proposición de que lo dejaramos para una sesión ulterior. SR. FRÍAS: Pido la palabra.

SR. PRESIDENTE: Tiene la palabra el Sr. Frías. SR. FRÍAS: Es mi opinión, aunque con pena por no haber podido participar de la primera parte de este de

ni tampoco recharzarlo, sino que acerca de él no cabe deliberar. Pienso que en manera alguna, sin realizar el Senado un acto que pudiere entenderse de censura hacia el Ejecutivo, es posible solicitar de dicho poder lo que pretende la Comisión de Hacienda y Presupuestos.

Por otra parte, el Ejecutivo nos ha enviado un proyecto de presupuestos que está en manos de la Comisión respectiva para dictaminar.

SR. RECIO: Como indivíduo de la Comisión de Ha-bate, que no procede dejar sobre la mesa este dictamen, cienda, que no ha firmado ese dictamen, debo declarar que no lo he firmado porque no estoy de acuerdo con él, y esto me coloca en una situación especial entre la moción del Sr. Zayas y la petición de la Comisión de Hacienda, porque ya casi se ha acordado que se discuta inmediatamente una de las dos mociones, y al discutir la una va á resultar también discutida la ot a. Yo que ahora me he venido á enterar de que hoy se iba á dar cuenta con la petición de la Comisión de Hacienda que acaba de leerse, quería pretender que no se discutiera hoy, porque yo necesitaba justificar mi disentimiento del criterio de dicha Comisión, y la única manera de justificarlo era por medio de un voto particular. De manera que yo quería que la moción del Sr. Zayas y la petición de la Comisión de Hacienda se aplazasen para la sesión próxima en la que encontraría el Sr. Zayas contestada su petición y justificada mi oposición á que se acepte la moción de la Comisión á cuyo efecto o consumiré un turno en contra ó apoyaré un voto particular.

Yo no estoy de acuerdo con el procedimiento que propone la Comisión de Hacienda, aunque estoy de acuerdo, ó mejor dicho, estaría de acuerdo siempre que se modificara un tanto ese procedimiento en una forma que se ajustara en algo á lo propuesto por el Sr. Zayas.

En resumen, que yo para justificar mi oposición á la petición de la Comisión de Hacienda, solicito que se deje esta discusión para la sesión próxima, porque se trata nada menos que de la interpretación de la Constitución en materia de presupuestos, asunto que entiendo que es transcedental, pues lo que nosotros hagamos en este caso va á sentar precedente en los casos sucesivos de la misma clase.

SR. PRESIDENTE: La presidencia entiende que si fuera un dictamen, en ese caso se podría acceder á lo que pide el Sr. Recio; pero como la Comisión que lo suscribe ha declarado que no es un dictámen, sino una petición ó una moción, como tal moción no vé inconveniente en que se ponga á la consideración del Sena

El deber de esa Comisión es dictaminar acerca de los Presupuestos, proponer la aprobación de los mismos ó recomendar las modificaciones que considere oportunas y la Constitución permita; la discusión del dictamen dará motivo á los Senadores para sostener, mediante enmiendas al dictamen, las alteraciones que cada uno crea convenientes, y de la tarea común, resultarán los Presupuestos, después de aprobados por la otra Cámara.

Yo sé que lo ante dicho tiene un peligro y es, que no permitiendo la Constitución al Congreso, al discutir el Proyecto de Presupuesto enviado por el Ejecutivo, alterar ni crear servicios dentro de la misma Ley de Presupuestos, así como tampoco aumentar la cifra que el Proyecto asigne á cada uno de los servicios presupuestados, se limita la tarea del poder legislativo á una mera labor de resta en los casos en que la economía se imponga ó una función aprobatoria cuando sea aceptable la cifra consignada por el Ejecutivo, sin que sea posible variar la estructura de los servicios cuando la variación no lleve consigo el aumento de la cantidad total asignada á cada servicio; de entender así la misión de las Cámaras en materia de Presupuestos, vamos á aprobar un Presupuesto que no responde á los servicios actualmente existentes, ya que con posterioridad al envío al Senado del Proyecto que vá á discutirse se han alterado muchos servicios y se han creado otros, alteraciones y creaciones desconocidas por nosotros, pues no constan de una Ley y han sido la obra caprichosa de los Sres. Secretarios del Despacho dentro de sus respectivos Departamentos, violando en más de una ocasión Ordenes del Gobierno Militar y

Leyes anteriores á la República, pero en vigor, que solo al Poder Legislativo le era dable derogar.

que implica una cuestión de orden. ¿El Sr. Frías ha formulado una proposición de no ha lugar á deliberar? SR. FRÍAS: Ese y no otro es el sentido de mi proposición.

SR. FRÍAS: (Interrumpiendo) ¿Cuál es el artículo de ese Reglamento.....

SR. PÁRRAGA: (Continuando) ...al Senado ó hace una petición, sobre punto que ha sido sometido á ella por el Senado mismo, no puede ser metido á una votación de no ha lugar á deliberar; el Senado podrá votar en favor ó en contra.

SO

SR. SANGUILY: Pido la palabra para una cuestión de orden.

Ese peligro que á primera vista asusta y caso de ser cierto nos llevaría á producir un trastorno grave en la administración del país, al empezar á regir los Presu- SR. PÁRRAGA: Pide la palabra. No cabe propopuestos que en esas condiciones debían salir del Sena-siciones de no ha lugar á deliberar cuanto se trata del do y la Cámara de Representantes; no tiene realidad, dictamen ó petición de una Comisión del Senado. desde el momento en que no podemos olvidar que nos También entiendo que una Comisión del Senado cuanencontramos en un período inicial, dentro de condicio- do informa nes anormales y en el preciso caso de adaptar nuestra vida preconstitucional al régimen que la Constitución supone ya en movimiento. El artículo de la Constitución que limita las facultades del Poder Legislativo en materia de Presupuestos, supone una serie de Leyes conforme á las cuales estén organizados todos los servicios del Estado, Presupuestos anteriores dentro de los cuales estuvieren contenidas las dotaciones de cada uno de dichos servicios, períodos legislativos entre unos y otros Presupuestos, aprovechables por los Cuerpos Colegisladores para discutir y aprobar nuevas Leyes reorganizadoras de los servicios antes creados y ó que á su vez creen los que las necesidades y conveniencias públicas demanden; por último, un Proyecto de Presupuestos enviado por el Presidente de la Repú-ión. blica á las Cámaras, formulado con extricta sujeción á los servicios existentes. En una palabra, que para tiempos normales, para cuando nuestra República esté marchando dentro de los moldes que la Constitución le ofrece, para entonces, el Poder Legislativo habrá organizado todos los servicios mediante Leyes especiales, de acuerdo con esas Leyes el Ejecutivo deberá formular el ante-proyecto de Presupuesto anual pudiendo asignar las dotaciones que mejor le parezcan, y el Congreso tendrá que ajustarse estrictamente, lo mismo que el Presidente, á las Leyes especiales, sin poder en la Ley de Presupuestos, variar ni crear servicios Ꭹ sí tan solo disminuir ó aceptar la cifra ó dotación que para cada servicio recomiende el ante-proyecto.

Poco esfuerzo se necesita hacer para demostrar que aún no hemos llegado á ese estado normal de cosas, que vamos hacia él, pero mientras tanto lo alcancemos, es necesario inspirarnos en un criterio amplio y ante todo práctico. Y ese criterio no debe ser otro que procurar cuanto antes tener un Presupuesto aprobado, poner coto á la intromisión que los Secretarios están realizando, yo quiero pensar que con el mejor deseo y solo ante necesidades apremiantes, en las funciones legislativas; traer á la discusión y aprobación el Proyecto de Presupuesto que el Ejecutivo envió hace ya meses al Senado y hacer que salga aprobado de manera que responda á las conveniencias actuales de la vida nacional.

La Comisión de Hacienda y Presupuestos en la proposición presentada pretende la misma cosa, pero por un camino tan distinto y que envolvería la ratificación en los Secretarios de las intromisiones realizadas y de las cuales lo mejor es no darnos por enterados, y además la abdicación de nuestras propias facultades. Pedir al Ejecutivo, aún cuando este tenga por su representante quien merece todos mis respetos, que nos diga que modificaciones debemos introducir en el Proyecto de Presupuestos que antes nos envió, para adaptar dichos Presupuestos á la situación creada posteriormente por los cambios y novedades introducidas en los servicios públicos por quien no podía hacer esos cambios y creaciones, eso es tan insólito, que no quiero creer que el Senado lo haga y más aún, desde luego presento una proposición de «no ha lugar á deli

berar.>>

EL SR. ZAYAS: Pido la palabra para una pregunta

SR. PÁRRAGA: Sobre una cuestión de orden, estoy hablando, Sr. Sanguily. El Senado podrá votar en favor ó en contra, decía: pero no puede ponerse á discusión ni votarse una proposición de "no ha lugar á deliberar" respeto á un dictamen ó petición de Comi

SR. PRESIDENTE: Tiene la palabra el Sr. Sanguily. SR. SANGUILY: Solamente para decir que el Reglamento establece que cuando se presente una moción de "no ha lugar á deliberar" no se puede discutir, se vota, y después podrá cada señor Senador que lo desee, explicar su voto.

y

SR. PRESIDENTE: En ese sentido está la presidencia, en tal pone á votación la moción.

SR. PARRAGA: Eso no es moción......

SR. PRESIDENTE: Es una proposición de «no ha lugar á deliberar,» el Reglamento no distingue. SR. ZAYAS: Pido votación nominal.

la Comisión de Hacienda. (Algunos señores Senadores SR. PARRAGA: Yo pido que se lea la comunicación de preguntan que es lo que se va á votar.)

SR. FRÍAS: Sencillamente que no ha lugar á delibe-
rar acerca de esta petición. (Lee la petición.)
SR. PRESIDENTE: ¿Sobre esto quiere el Sr. Frías que
no haya deliberación?

SR. ZAYAS: Y el que diga «sí» ¿vota con el Sr. Frías?
SR. PRESIDENTE: Así es.

(Efectuada la votación resulta empate. Votaron que si los señores Zayas, Betancourt (A.,) Tamayo, Cisneros, Cabello, Recio, Bustamante, Sanguily y Frías, total 9; y votaron que no los señores F. Rondan, E. Mora, Carrillo, Monteagudo, G. Beltrán, Dolz, Párraga, Morua y Silva, total 9.)

SR. DOLZ: Pido la palabra.

SR. PRESIDENTE: Se resolverá en la sesión próxima. Tiene la palabra el Sr. Dolz, para explicar su voto.

SR. DOLZ: Me he opuesto á la proposición de no ha lugar á deliberar, porque las proposiciones de no ha lugar á deliberar se presentan respecto de aquellas materias que no conviene siquiera hablar de ellas, se exponen muy sencillamente y se pide que no se hable de tal particular; por eso el Reglamento prohibe la discusión. Pero me he opuesto ahora porque resulta cosa extraordinaria que después de consumir los señores Zayas y Frías varios turnos sobre esta materia, des, achándose á su gusto, presenten una proposición de no ha lugar á deliberar, que será de no ha lugar á, deliberar los demás, porque ellos ya han deliberado á sus anchas.

SR. ZAYAS: Pido la palabra.

SR. PRESIDENTE: La tiene el Sr. Zayas.

SR. ZAYAS: He votado que si porque disiento en un

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